A la nocturna vuelta
- Daniel Vallejo
- 15 mar 2014
- 1 Min. de lectura
A ésta hora cuántas lluvias se apoderaran de la noche. Una gota no es lo mismo en una vereda, que en la angustia del cuerpo. Un cuerpo que llueve adentro, y una guarida acompañante. Un cuerpo encerrado en la emoción de alguna tonada nocturna, y la lluvia toca la tonada más solitaria del mundo. Mi cuerpo, la lluvia. No hay musas, no hay inspiración, tan sólo es la palabra angustiosa, no cuantificable resistiéndose a fluir.
Prosa Poética: Carlos Daniel Vallejo Sánchez
Canción: Hector Napolitano
Commentaires